ESTAS VACACIONES DISEÑEMOS NUESTRAS VIDAS

El mar, la montaña, los lagos, los bosques, el sol y la nieve son elementos de la naturaleza que nos estimulan el espíritu. Nos conectamos con lo esencial y nuestro cuerpo logra relajarse. Nuestra mente y alma se conectan con el aquí y ahora.
¡Al fin! Al fin podemos vivir el momento, estar presentes, estar al mando de nuestro destino.

Cómo diseñamos nuestra vida es más importante que cómo diseñamos nuestras casas y objetos. La vida tiene o no tiene estética. La vida al igual que el arte se construye con un ritmo: secuencias espaciales de tiempo de distintos pensamientos y actividades.

Por eso debo elegir lo más conscientemente posible en qué pienso y en qué uso mi tiempo, y que proporción de cada actividad llenan mis días. Si fuéramos conscientes que la vida la estamos pintando como a un cuadro minuto a minuto, día a día, seguramente usaríamos nuestro tiempo más amorosamente.

Nuestra sociedad evolucionó tanto con la tecnología que nos permite acceder al mundo desde nuestro teléfono. Se acabaron las largas colas para pagar las cosas, presentar un trabajo hoy es tan fácil como apretar un botón para mandar un mail.

Podemos reunirnos con amigos todos los días a través de un grupo de chat: la realidad es que tenemos mucho más tiempo. ¿En qué lo vamos a usar? ¿En mirar vidas ajenas a través de Instagram o en vivir nuestras vidas lo más estéticamente posible?

Como dice Platón: “La belleza es igual a verdad”. Hagamos de nuestras vidas un hecho bello, que den ganas de ser vivido. Sólo tenemos una oportunidad de diseñar lo que nos pasa y esa oportunidad es ahora, hoy y está en nuestras manos.