¿Cómo es un día ideal para Juan Minujín?
Tengo una rutina bastante acomodada, que también depende de mi actividad en ese momento. Hoy, me gusta levantarme a las nueve, desayunar con mi esposa y mis hijas, jugar al tenis, leer, comer rico en algún lado, para después pasar un poco el tiempo hasta la hora del teatro.
En tu familia estás rodeado de mujeres, ¿qué significan para vos?
Me encanta porque puedo desarrollar mucho de mis aspectos más femeninos. Con mi mujer Laura hace 20 años que vamos de la mano, con una base construida en el humor, la libertad y la curiosidad que tenemos el uno por el otro.
Con mis hijas es divino poder vincularnos de la manera que lo hacemos: trato de estar atento a ellas, a lo que les va pasando, lo que van sintiendo en cada etapa que transitan. Disfruto mucho de compartir programas o actividades concretas.
En “100 días para enamorarse”, tu personaje va experimentando situaciones que lo hacen ir cambiando la perspectiva de su vida, ¿has vivido situaciones en tu vida personal que te hayan hecho cambiar de esa forma?
Si, varias. Trato de tomarme el tiempo para pensar cada experiencia como algo para aprender. Me analizo hace muchos años y eso también me ha hecho cambiar muchas cosas, miradas, puntos de vista.
Estás en el proyecto de Atlantis Mapas, ¿cómo empezó?
Fue por un intento de compartir más tiempo con mis hijas y que cortemos con las pantallas por un rato. Desde chico me gusta mucho la geografía, y al mismo tiempo, a la familia nos encanta dibujar. Es un espacio de placer y de charla, y de paso, aprendemos cosas de Argentina.
En esta gran transformación que se está viviendo a nivel mundial en relación a las mujeres y su empoderamiento, ¿cómo sentís que se está viviendo?
¿Cuáles son los proyectos futuros en este 2019?
Por ahora, sólo voy a hacer teatro. Disfruto mucho de tener más tiempo libre: escribo, tomo clases de piano, hago deportes, veo amigos, disfruto de la familia.
Si tuvieras que presentarte a alguien por primera vez, ¿qué dirías de Juan?
Que es más tímido de lo que parece, tiene perdición por las cosas dulces, y a veces le cuesta prestar atención a las cosas. Que fuera del trabajo, se distrae bastante. Que ama con locura a sus hijas y a su esposa, y que está agradecido con sus padres y a la vida que le dieron.
Ser invisible.
Las amo a las dos: ambas son personas hermosas. Con Carla tenemos una com
plicidad muy especial porque trabajamos en varias oportunidades y eso generó mucha afinidad. A Nancy la conocí el año pasado ¡y la adoro!
Cada una representa un momento muy lindo para mí, ¡no puedo elegir!
Asado el domingo.
Café con leche. Soy adicto.
La variedad.
Durante su infancia, en los primeros años de vida, vivió en México. Sus padres eran militantes y en pleno desarrollo de la dictadura militar de 1976, debieron exiliarse. En 1983, cuando volvió la democracia, regresaron a la Argentina.
Sin embargo, más allá del panorama político y social de la época, el país mexicano fue el puntapié para construir un Juan artístico, libre y con ganas de volar alto. Su familia ya tiene una antecesora que siempre marcó tendencia: la artista plástica, Marta Minujín.
Tiene una larga trayectoria arriba del escenario y detrás de la pantalla. Algunos de sus personajes más emblemáticos fueron “Ezequiel Lambert” en “Tiempos compulsivos”, “Félix Month” en “Solamente vos”, “Segundo Arostegui” en “Viudas e hijos del rock and roll”, “Pastor Osvaldo Peña/ Miguel Palacios” en “El marginal”, y “Gastón Guevara” en “100 días para enamorarse”, entre otros.
Actualmente, se encuentra en la obra teatral “La verdad” (argumento original del francés Florian Zeller) con Jorgelina Aruzzi, Valeria Lois y Héctor Díaz, bajo la dirección de Ciro Zorzoli, en la cual interpreta al querido “Miguel”.
Asistente: Maca Cuesta @macacuestaa
Arte: Dolo casado de Achaval @docasadodeachaval
Vestuario
Paula Lopez @lanavedepol
Cata Rodriguez Loredo @catalinaarl
Gastón bauza @gastobauza
LOOK:
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