Un viaje en tren es un destino en sí mismo. Viajar en tren es mucho más que sólo un medio de transporte; es mucho más que sólo trasladarse del punto A al punto B. A través de la ventanilla del tren podés apreciar los hermosos escenarios de las campiñas, de los pueblos y de esas áreas de las ciudades que no explorarías en un recorrido tradicional. Es una forma distinta de acercarte a cada región, disfrutar de su particular geografía y de su arquitectura rural o urbana que mucho revelan de cada sociedad.
Mejor aún, el tren permite descubrir espacios poco accesibles y de espectacular belleza a los que difícilmente podrías llegar por otro medio de transporte. Pensá, por ejemplo, en la majestuosidad de las montañas en Suiza o las extensas praderas verdes de Escocia con sus lagos y sus colinas o los fiordos en Noruega. Estos son sólo algunos ejemplos de las gratas sorpresas que te esperan en un recorrido por tren.
A diferencia de los aeropuertos, en las estaciones de tren no se requiere llegar con horas de anticipación, despachar equipaje, pasar por inspecciones incómodas o hacer largas filas para embarcar. Todo ese proceso se simplifica de manera importante al viajar en tren.
La mayoría de los viajeros estamos acostumbrados a los tiempos y procedimientos indicados por las líneas aéreas. A diferencia de los aeropuertos, en las estaciones de tren no se requiere llegar con horas de anticipación, despachar equipaje, pasar por inspecciones incómodas o hacer largas filas para embarcar. Todo ese proceso se simplifica de manera importante al viajar en tren. Ya sea un viaje nacional o internacional, sólo basta llegar a la estación con 30 minutos de antelación, lo cual es tiempo suficiente para ubicar la plataforma de salida de tu tren y abordar con tu valija en mano.
En el interior del vagón, la distribución de espacios es más amplia que en un avión y hay asientos apropiados para pasajeros que viajan solos o en grupo. Adicionalmente, aunque muchos trenes tienen sistemas de entretenimiento o conexión wifi, muchos viajeros prefieren conversar con otros viajeros locales, leer un buen libro o simplemente disfrutar del paisaje mientras te sumerges en tus propios pensamientos.
Hay una verdad absoluta: cuando viajás a Europa, querés aprovechar al máximo tiempo y visitar todo lo que sea posible mientras tenés más horas de luz en primavera y verano. En estas circunstancias, viajar en tren es tan cómodo y tranquilo que ayuda mucho a descansar y recuperar energía para llegar a tu siguiente destino.
…viajar en tren es tan cómodo y tranquilo que ayuda mucho a descansar y recuperar energía para llegar a tu siguiente destino.
Como podés apreciar, el tren brinda una manera sencilla, conveniente y económica de viajar de una ciudad a otra, disfrutando de la moderna y eficiente infraestructura ferroviaria europea. En la página web de Rail Europe, podés consultar otras ventajas de por qué elegir el tren para recorrer Europa.
www.raileurope.com