El “European Green Deal” para la moda y otras manufacturas no solo tiene en cuenta la sostenibilidad, también la importancia de acabar con la dependencia externa.
Europa se quiere encaminar, hacia un mundo verde. Uno en el que sus industrias de bienes físicos de consumo, incluida la moda, sean elaborados de manera sostenible. Para ello la Comisión Europea, organismo de la UE que entre otras funciones se encarga de elaborar propuestas legislativas, desde su Plan de Acción para una Economía Circular, ha redactado el que sería un nuevo “Green Deal” a nivel europeo para aspirar a un mercado “más amable con el medio ambiente, circular y energéticamente eficiente durante todo su ciclo de vida”. Una propuesta que afectará a la industria de la moda tal y como la conocemos, dado que impactaría de lleno en las prácticas de producción de la llamada fast fashion, actualmente una de las industrias más dañinas y contaminantes.
En nuestro continente, el consumo de moda y otros textiles supone el cuarto mercado con mayor impacto en el cambio climático después de la industria alimentaria, la inmobiliaria y los transportes, según informa la Comisión Europea. La moda es el tercer producto más consumido por detrás del agua y la utilización del suelo, y el quinto en el gasto de materiales vírgenes. Te explicamos la manera en la que esta nueva propuesta afectará a la industria de la moda y a nuestros propios hábitos de consumo.