Abel Ayala comenzó su carrera de actor con la película «El Polaquito» dirigida por Juan Carlos Desanzo. Actualmente, está disfrutando del éxito de la serie el «Marginal 2». Pero, sus inicios datan una historia de vida complicada y humilde.
El actor inició su entrevista comentando haber sido criado por sus abuelos, pero que a los nueve años decidió vivir en la calle «…Porque prácticamente vivía en la calle, como un montón de chicos, prácticamente no estaba en mi casa. Entonces, no hubo una transición concreta, yo iba y venía y un día no volví» .
Ayala mencionó que cuando era chico no sabía que su mamá biológica era su hermana. «Lo que pasa es que éramos muchos, muchos tíos, muchos primos, mucha gente, y no estaba claro el tema de las relaciones. En ese momento mi mamá biológica era mi hermana y mi abuela era mi mamá biológica. Era lo que ellos me decían, y yo creía eso porque era chico. Después cuando me fui, cuando llegué al hogar, ahí me di cuenta de que mi hermana era mi mamá».
¿Donde te fuiste, eras muy chico tenias nueve años? le preguntó el conductor.
«Me fui a vivir a Constitución, y gracias a unos asistentes sociales terminé en un hogar. La conocí a Nicole Neumann, ella fue al hogar en un momento. Hace poco fui a su programa y se lo recordé». Nicole era también invitada del programa. «Éramos como 40 chicos, y cada vez que llegaba alguien del exterior íbamos todos corriendo a ver qué había. Y ella había llegado con una amiga, creo que Verónica de la Canal, y me acuerdo que bajó y yo le vi un caballito, tenía un caballito tatuado», recordó.
«¿Y del hogar a dónde te fuiste?», le preguntó Andy.
«Me fui a los 17 años del hogar y ya había empezado a trabajar, cuando hice El Polaquito, a los 12. Un día Desanzo llegó y nos reunieron en el comedor a todos los chicos, nos contaron que él era un director de cine que estaba preparando una película sobre la vida de un pibe de la calle y que él quería trabajar con un pibe de la calle, que por eso estaba ahí y preguntaron quién quería sumarse y me sume. Lo hice y a los dos meses me reunieron en la oficina de los coordinadores y me dijeron que Desanzo quería que yo hiciera la película. Fue increíble, porque además élme iba a buscar todos los días al hogar y la llegada de «El Polaquito» me abrió la posibilidad de conocer otros universos». Recordó el actor sobre sus inicios.
«¿Los viejos, tu abuela, tu mamá nunca volviste?» indagó el conductor.
«Nunca volví. Ellos me encontraron, al tiempo, cuando yo ya estaba en el hogar, y me acuerdo de que cuando me encontraron yo ese día me puse a llorar, tenía mucho miedo porque pensé que ellos me iban a sacar de ahí y yo me quería quedar. Ellos me dijeron que podía elegir y ahí elegí quedarme hasta los 17 años» contestó entre lágrimas.