Se nos estremece el corazón de sólo ver esas caritas llenas de inocencia, ternura, travesura y alegría ¡Seguramente a vos te pasa lo mismo! Mirá:
Ella es Natalia, desde pequeña le encantaban los animales, además siempre fue tímida y le resultaba más fácil conectar con ellos: “Con los años decidí estudiar fotografía y conforme avanzaba descubrí que la cámara y las mascotas eran una combinación perfecta para mi, podía pasar horas con la cámara en la mano y me resultaba mucho más fácil y natural que fotografiar a gente”. Pudo mezclar su amor por los animales con su profesión apasionante. Por eso, la fotografía y los perros forman parte de su día y de su vida.
¿Algún sueño a futuro? Le preguntamos, su respuesta nos llenó de encanto:
“Llevo muchos años fotografiando mascotas y mi gran sueño sería poder dedicarme a ello a tiempo completo, vivir de lo que realmente disfruto haciendo. De momento sigo andando hacia delante, aprendiendo, mejorando y disfrutando por el camino de los peludos y sus compañeros humanos que voy conociendo”.
@nataliae.fotografia