Es una técnica relativamente nueva, que explotó en pandemia en todas las redes sociales. La pregunta es si funciona realmente y ahora te lo explicamos.
El yoga facial consiste en una serie de estiramientos, ejercicios de tonificación y masajes que ayudan a los músculos de la cara a que mantengan su fortaleza. Estos ejercicios se pueden realizar a toda edad y no tiene contraindicaciones.
Beneficios
El principal es que ayuda a dar flexibilidad a la piel. Esto hará retrasar al envejecimiento, sobre todo si lo combínanos con una buena hidratación. Además, el yoga facial fortalece la musculatura del rostro y cuello, al igual que cuando hacemos ejercicio. Pero lo más importante es el efecto que tiene al practicarse de formar regular, ya que genera una mayor oxigenación al aumentar la circulación.
¿Logra borrar las arrugas?
La respuesta es no. Porque en realidad nada las borra, pero sí logra atenuarlas gracias a la mayor oxigenación que se genera al practicar yoga facial. Es que gracias a los beneficios que aporta es fácil lograr en un tiempo corto un aspecto más juvenil. El cuello, los labios y las mejillas se verán considerablemente mejores, eso sí debemos practicarlo de forma regular.
¿Cada cuánto hay que hacer yoga facial?
La idea es practicarlo entre 3 a 5 veces por semana, durante 15 minutos y repetir alrededor de 20 veces cada ejercicio. Desde el cuello hasta la frente, podemos buscar en internet distintos tipos para ejercitar todas las zonas de la cara.
¿Por qué algunos la desaconsejan?
Algunos expertos afirman que hacer ejercicios de manera reiterada sobre el cuello y rostro puede causar el efecto contrario y arrugar la piel. Por eso, sugieren que sólo hay que practicarla con profesionales en el tema. Al igual que sucede con cualquier otro tipo de ejercicio.