Rosario Lopez Ercoli, artista de Buenos Aires (Trenque Lauquen), nos invita con sus obras a transitar la experiencia de la Pintura como un diálogo íntimo y cómplice entre su naturaleza más íntima, la superficie y su yo.
El vivir entre dos mundos: expresar, sentir, encastrarse, soltarse, dejarse llevar, crear, volar, irse por unos instantes y viajar. En su obra hay una lucha interna entre el caos de la ciudad, del cemento y del disfrute de la naturaleza, del campo, olor a pasto recién cortado.
“Siento como si estuviera desenredando sentimientos cuando pinto, sacando capa por capa esas sensaciones que están tan guardadas que una ya no se acuerda que las tenía. Los sonidos más primitivos son los que quedan plasmarlos en el lienzo, son mis tesoros los que se plasman.