21/11/2024

LA CIUDAD PERDIDA TE ESPERA

Por Marcelo López

Petra, la joya de Jordania, es un sitio arqueológico que provoca asombro desde el primer momento y que te hace preguntarte una y mil veces si “será eso que imagino”. Esta antigua capital de los nabateos es todo eso que has visto e imaginado y mucho mas porque nos transporta a un pasado glorioso, donde el comercio y la cultura florecieron en medio del desierto, desde los nabateos a los romanos y a los beduinos mas acá. 

La experiencia comienza con un paseo por el Siq, un desfiladero estrecho y serpenteante, que se desliza entre altas paredes de piedra. La luz juega entre las rocas, creando un espectáculo de sombras y colores que anticipa la grandeza de lo que está por venir. Al final del Siq, la vista se abre a una de las imágenes más icónicas del mundo: Al-Khazneh, el Tesoro. Este imponente mausoleo, tallado en la roca, revela la maestría de la arquitectura nabatea y deja sin aliento a los que llegamos a verlo. Cabe destacar que todos los grandes monumentos de Petra fueron tumbas. 

Más allá del Tesoro, Petra se despliega como un laberinto de templos, tumbas y teatros. Los visitantes pueden explorar la majestuosidad del Teatro Romano, con su capacidad para albergar a 3,000 personas, y el Monasterio, que, aunque se encuentra en un cero cercano, vale cada paso de las 800 escaleras que hay que subir para llegar a él. La vistosidad del Monasterio rivaliza incluso con la del Tesoro, y su expansión monumental es un claro recordatorio de la grandiosidad que tuvo este maravilloso lugar (y que aun conserva) 

La experiencia de Petra no se limita a su patrimonio arquitectónico. Los paisajes naturales que rodean la ciudad son igualmente cautivadores. Senderos serpenteantes, miradores que tienen vistas impresionantes del desierto y de las formaciones rocosas que parecen cambiar de color con el paso del sol. Los puestos de los vendedores de souvenirs y artesanías son también una parte importante de ese paseo. Son beduinos y están allí como parte de un acuerdo con el gobierno ya que Petra estuvo habitada hasta 1982, precisamente por los Beduinos, que aceptaron mudarse a una ciudad especialmente desarrollada para ellos, a cambio de quedarse con el “monopolio” de los servicios en Petra. 

Por la extensión de la ciudad, por la grandeza de su pasado, por la riqueza del entorno recomiendo dos días para poder aprovecharla realmente y llevarse toda la magia de un lugar único en el mundo. En definitiva, visitar Petra es más que simplemente explorar un sitio arqueológico; es un viaje a través del tiempo, donde la historia, la cultura y la naturaleza se entrelazan en una experiencia inolvidable. Cada rincón de Petra cuenta una historia, y sin duda esa historia habla de la suerte de quienes pueden conocer este maravilloso lugar. 


Comentarios


Te puede interesar...

EN REPUBLICA DOMINICANA, EL PARAÍSO SE LLAMA BAYAHIBE

USHUAIA, INVIERNO 2021, EN CÓRDOBA

ÁFRICA

LAS ROSAS

GRATIS
VER