“…Mi visión es curar y gestionar un número limitado de lugares seleccionados para el disfrute de nuestros huéspedes. En Casas Latinas ofrecemos a quien nos elija la oportunidad de vivir y experimentar la esencia, el patrimonio y la hospitalidad de estos destinos genuinos…”
Casas Latinas
Casas Latinas es un proyecto que ofrece a dueños independientes de casas, hoteles, estancias o propiedades una gestión personalizada de intervención a medida de cada proyecto, combinando el cuidado del entorno y la experiencia de la hospitalidad, para transformarse en un destino inolvidable relacionado con las herencias locales. Se trata de una selección curada de lugares que representan una forma de crear un viaje lleno de momentos creativos en América Latina e Italia.
Hub Porteño
Hub Porteño es uno de los espacios elegidos por Massimo Ianni como parte de Casas Latinas. Ubicado en la mejor zona del barrio de Recoleta, el hotel es ideal para conectarse con la ciudad: una casa de lujo urbana pensada para potenciar la experiencia de la vida porteña. Ofrece arquitectura, historia y diseño en todos sus ámbitos, así como también, espacios llenos de confort, con una reconstrucción creativa y madura, con la hospitalidad y la búsqueda de sensaciones como eje de la experiencia.
NOVEDAD
Entre otros servicios, Massimo Ianni presentó Club Porteño, una exclusiva membresía por afinidad que tiene como objetivo acercar a sus socios a distintas actividades dentro de Buenos Aires y en el mundo. Su innovación se centra en el proceso de ingreso de miembros, el cual se verá gestionado a través de un comité formado por funcionarios del hotel y de sus embajadores.
MASSIMO IANNI
Massimo Ianni es italiano, criado en Francia y formado en escuelas de hotelería suizas, tiene un métier sofisticado: crear hoteles de lujo. A los 28 años, en el ’93, fue nombrado Director General del emblemático Hyatt, ubicado en Buenos Aires. A la vez, realizó la remodelación tanto de los hoteles Armani, en el mundo, como del ya conocido hotel porteño Faena. Hace un año adquirió una estancia de estilo francés de 1902, llamada La Fortuna, y la reconvirtió en un alojamiento con un esquema inédito, propiedad que pasa a ser parte del proyecto Casas Latinas.