POR: Marcelo Lopez- @marcelolopezcba
Hay una Italia que comienza en Roma, sigue por Venecia, Milan, La Toscana, Florencia, Pisa, Napoles, La Costa Amalfitana y llega incluso a Sicilia. ¡Pero! hay otra Italia: una que se mantiene relativamente inexplorada y fuera de los circuitos tradicionales de los grandes corredores turísticos; Donde los sabores de sus comidas y sus vinos son distintos y autenticos, sitios donde sus playas son diferentes y sus ciudades son pequeñas joyas por descubrir.
LA PUGLIA
La Puglia es ese pedazo de la “bota” que se asemeja al “taco”, bañada por el Adriático de frente a Croacia y el Tirreno del otro lado. Una tierra de ensueño, árida y agreste, de gente amable, de cocina original, de vinos suaves y de paisajes monumentales. Sin lugar a dudas Italia es un país riquísimo en paisajes, costumbres y destinos, tan diversos como encantadores.
Lecce
También llamada la “Capital del Barroco” por la cantidad y calidad de sus edificios contiene cuatro puertas de entrada para disfrutar y conocer la ciudad debido a que es un excelente punto para alojarse y desde allí moverse por toda la región.
El verdadero placer de Lecce se descubre andando, recorriendo calles, asombrándose de pequeños rincones, de edificios antiquísimos cuidadosamente reciclados, de pequeños negocios preciosamente decorados.
#DATO
Un muy buen lugar donde almorzar o cenar es Doppiozero, un ecléctico restaurante y wiine bar en una esquina “rebuscada” de la Via Guglielmo Paladini.
Otranto
Una pequeña ciudad amurallada, apretada contra el Adriático donde tan solo al llegar ya se respira otro aire: el mar azul profundo, las piedras amarillas típicas de la zona, torres de castillo medieval, un pequeñísimo puerto con barcos de colores y gente en las playas de arena fina. Sin lugar a dudas Otranto es uno de los lugares de mejor nivel de Puglia en cuanto a turismo: aquí encontramos mucha gente de Francia, Alemania e Inglaterra, demostrando que hay motivos para descubrirla. Recorrer sus calles es un placer para la vista y para los sentidos.
#DATO
Vicolomato Bistrot es un pequeño restaurante para hacer una parada y recuperar fuerzas comiendo algunas de sus exquisitas pizzas o sus platos de mar. Con seguridad, una gran elección.
Gallipoli
Una ciudad pequeña de casas y edificios relativamente nuevos y un castillo con su casco histórico entrando al mar como una península. Sus calles son laberínticas y casi todo esta sobre las murallas que la elevan y separan del mar. Adentro apenas algunos negocios y restaurantes. Gallipoli se ha convertido en los últimos años en un lugar de veraneo y paseo de alto nivel: es una combinación de buen gusto y experiencias de lujos y exclusividad con cierto grado de autenticidad. Gallipoli esta en lo que es la famosa Bahia Verde, un rosario de playas de arena y aguas impecables.
#DATO
Uno de los lugares ideales para cenar en la muralla y mirando al mar es la Trattoria Scoglio delle Sirene, con platos típicos puglienses.
Alberobello
La rareza y la belleza del lugar está dada por la presencia de los famosísimos “trulli”: son pequeñas y antiguas casas que tienen la particularidad de ser casi todas circulares sin ventanas, con techos de piedras prolijamente ubicadas, sin ningún tipo de pegamento. El pueblo de Alberobello es muy turístico por su belleza, prolijidad y comodidad.
Matera
La Ciudad de Matera, tal y como Alberobello, es definida por un tipo de vivienda que le dio fama y carácter. “Sassi” son casas que conforman su casco antiguo pero que tienen la particularidad de estar excavadas en la roca caliza del lugar. Son construcciones antiquísimas que, con el tiempo se fueron modernizando y haciendo más confortables.