El consumo responsable llegó a la moda de lujo de la mano de New Dress Rent. Valentino, Alexander McQueen, Isabel Marant son algunas de las marcas que se pueden alquilar a un precio menor de lo que costaría uno nuevo. Asesoría personalizada, precios accesibles y re uso son parte de la nueva propuesta de Romina Pigretti.
Inspirada en el nuevo paradigma del consumo consciente y las economías compartidas, Romina Pigretti creó New Dress Rent, la primera tienda de alquiler de vestidos de lujo del país. Después de años trabajando en la industria de la moda, Pigretti decidió apostar por un proyecto que promoviera un modelo de consumo más sustentable y responsable, que permitiera un acceso más democrático al lujo a partir del principio de la moda circular.
Con una curaduría especialmente pensada según los gustos de la mujer argentina, New Dress Rent ofrece vestidos, accesorios y asesoramiento personalizado. Todo empieza con algunas preguntas clave: qué tipo de evento tenés, dónde es, tu estilo y talles. A partir de eso, una especialista te hace una selección sugerida que podés ir a probarte con su asesoría a su showroom en Barrio Parque o pedir que se envíe a tu casa si lo solicitás en la página web. La colección tiene más de 500 vestidos: Valentino, Alexander Mc Queen, Isabel Marant, Alexander Wang, Stella Mc Cartney, Sonia Rikiel y Prada, son algunas de las marcas seleccionadas que están disponibles. Una vez elegido el item, se alquila por determinado tiempo, se usa y se devuelve en la misma bolsa ecológica que fue entregado para que New Dress Rent se ocupe de la limpieza. La propuesta es que tengas menos gastos y más comodidad sin generar un desgaste ambiental innecesario.
Hacia un consumo más responsable
Cuando hablamos de una tienda de alquiler de vestidos de lujo, no estamos hablando solo de ahorro: estamos planteando un cambio en la concepción del consumo. La industria de la moda, es la segunda en términos de contaminación. “El impacto y el desgaste que cada pieza genera, es mucho; es difícil cambiar esa realidad desde el lugar del simple consumidor”, reflexiona Romina Pigretti. “La idea es que un vestido no se lo use una sola persona una o dos veces sino treinta”, propone. El paradigma del end of the ownership se sostiene en un consumo más colectivo, en el que muchos individuos comparten beneficios sin necesidad de acumular cosas. “Yendo a lo que es más moda: este sistema permite que salgamos del uniforme negro que compramos pensando que es un clásico que podemos repetir. La realidad es que hoy en día, muy pocas mujeres compran vestidos llamativos sabiendo que solo pueden usarlo una vez”, asegura. La idea de la renta Así como en su momento lo plantearon Uber, Cabify o Spotify, hoy la tendencia llegó a la moda de la mano de marcas como Rent the Runway, Style Lend o Le Tote, con un negocio que replicaron en sus propias unidades de renta las clásicas Urban Outfitters, Vince y Banana Republic, entre otras.