Selena Gómez, de 26 años, sufrió una «crisis nerviosa» debido a un bajo nivel de glóbulos blancos en sangre. La joven había ingresado al hospital la última semana de septiembre a causa de este alarmante resultado.
La ex estrella de Disney padece de lupus desde 2015 y a raíz de esta enfermedad debió recibir un transplante de riñón en 2017. En ese entonces, Selena Gómez recibió el alta tras unos días en el hospital Cedars-Sinai Medical Center de Los Ángeles (California).
Sin embargo, a fines de septiembre la cantante debió ser ingresada nuevamente al hospital por su persistente baja en los glóbulos blancos. Esta situación derivó en un «espiral de emoción negativa».
Gómez sufrió una crisis nerviosa después de que los médicos no la dejaran retirarse del establecimiento, por lo que intentó arrancarse las vías intravenosas del brazo.
La cantante se encuentra en un centro psiquiátrico para recibir una terapia dialéctica de comportamiento, un tratamiento que ya realizó en el pasado.
En 2014, la cantante estuvo dos semanas en rehabilitación por consumo excesivo de alcohol, marihuana y fármacos tras su ruptura con Justin Bieber.
Selena Gómez hace dos semanas anunciaba que se alejaba de las redes sociales para darse un descanso.